HOSPITAL ÁNGELES METROPOLITANO

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Dr. Michell Ruiz Suárez

Artroscopia, Cirugía de Hombro y Codo, Cirugía de Rodilla y Lesiones Deportivas

DR. MICHELL RUIZ SUÁREZ

El Dr. Michell Ruiz Suárez es un experto en Traumatología y Ortopedia desde hace más de 15 años. Está basado en el Hospital Ángeles Metropolitano ubicado en la Ciudad de México.

Es médico especialista en hombro, codo, rodilla, medicina deportiva, artroscopia y artroplastia. Obtuvo su Maestría y Doctorado en Ciencias Médicas y Filosofía en la UNAM. Fue residente de Cirugía Ortopédica en el Centro Nacional de Rehabilitación – Centro Nacional de Rehabilitación de Ortopedia.

Hizo 2 fellowships en el Instituto Nacional de Rehabilitación. El primero en Cirugía Articular bajo la tutela del Dr. José Manuel Aguilera y el Dr. Clemente Ibarra y el segundo en Cirugía de Hombro y Codo bajo la tutela del Dr. Fernando Valero. Posteriormente acudió a un tercer Fellowship en Sports Medicine en el Plano Orthopedic and Sports Medicine Center bajo la tutela del Dr. F. Alan Barber. Posteriormente fue seleccionado por la Arthroscopy Association of North America para el Traveling Fellowship de la Asociación.

Es profesor adjunto del Programa de Alta Especialidad en Traumatologia Deportiva y Artroscopia de la UNAM y Grupo Ángeles Servicios de Salud.

Es miembro de varias sociedades científicas, es miembro activo del Colegio Mexicano de Ortopedia y Traumatología AC y es miembro fundador y activo de la Sociedad Mexicana de Cirujanos de Hombro y Codo. También es miembro de múltiples revistas científicas, como Journal of Arthroscopic and Related Surgery.

El doctor Michell Ruiz Suárez en un experto en la artroplastia reversa de hombro

Artroplastia reversa de hombro

La artroplastia reversa de hombro es una cirugía que consiste en reemplazar la articulación del hombro dañada por una prótesis artificial, pero invirtiendo la anatomía normal de la cabeza y la cavidad del hombro. Es decir, se coloca una cabeza artificial en el omóplato y una cavidad artificial en el hueso del brazo. Esta cirugía se desarrolló como una solución para los pacientes que sufrían de artropatía por deficiencia del manguito de los rotadores, una condición en la que los tendones que estabilizan el hombro se rompen y provocan dolor, inflamación y pérdida de movilidad. Además, esta cirugía también se utiliza para tratar otras patologías como fracturas complejas de la cabeza humeral, artritis reumatoide, artrosis severa y revisión de prótesis fallidas.

La historia de la artroplastia reversa de hombro se remonta a los años 70, cuando el cirujano francés Paul Grammont diseñó el primer modelo de este tipo de prótesis. Grammont se basó en el concepto de que al invertir la posición de la cabeza y la cavidad del hombro, se podía restaurar el equilibrio entre las fuerzas que actúan sobre la articulación y mejorar la función del deltoides, el músculo principal que eleva el brazo. Sin embargo, no fue hasta los años 90 que esta cirugía empezó a ganar popularidad y aceptación entre los especialistas en hombro, gracias a los avances en el diseño de las prótesis, las técnicas quirúrgicas y los estudios clínicos que demostraron su eficacia y seguridad.

Las ventajas de la artroplastia reversa de hombro son varias. En primer lugar, permite aliviar el dolor crónico que sufren los pacientes con patologías irreparables del hombro. En segundo lugar, mejora la movilidad y la fuerza del hombro, permitiendo al paciente realizar actividades cotidianas como peinarse, vestirse o alcanzar objetos. En tercer lugar, evita el desgaste y la inestabilidad de la articulación, que pueden provocar complicaciones a largo plazo como osteonecrosis o luxación.

Sin embargo, como toda cirugía, la artroplastia reversa de hombro también tiene sus riesgos y limitaciones. Algunas de las complicaciones más frecuentes son la infección, la fractura periprotésica, la lesión nerviosa, la disfunción del deltoides y el aflojamiento o desgaste de la prótesis. Además, esta cirugía requiere de un cuidadoso seguimiento postoperatorio y un programa de rehabilitación supervisado por un profesional. Asimismo, los pacientes deben tener en cuenta que la prótesis no tiene una duración ilimitada y que puede necesitar ser reemplazada en el futuro.

Por último, es importante destacar que la artroplastia reversa de hombro es una cirugía compleja que requiere de una gran experiencia y habilidad por parte del cirujano. Por eso, se recomienda acudir a un experto en esta técnica, como lo es el Dr. Michell Ruiz Suárez en la ciudad de México. El Dr. Ruiz Suárez es un traumatólogo ortopedista especializado en cirugía de hombro y codo, con más de 15 años de experiencia y reconocimiento nacional e internacional. El Dr. Ruiz Suárez ofrece una atención personalizada y de calidad a sus pacientes, utilizando las prótesis más avanzadas y las técnicas más innovadoras para lograr los mejores resultados posibles.

Doy atención a todos mis pacientes siguiendo un modelo de cuidado centrado en ellos (sus necesidades, situación y objetivos). Estoy involucrado no solo en la atención clínica sino en el desarrollo e innovación científica y tecnológica a nivel nacional e internacional, así como estar involucrado en la enseñanza y difusión del conocimiento.

Sobre mí

Dr. Michell Ruiz Suárez

Soy miembro certificado del Consejo Mexicano de Ortopedia y Traumatología A.C., miembro titular del Colegio Mexicano de Ortopedia y Traumatología A.C., miembro titular de la Asociación Mexicana de Cirugía Reconstructiva Articular y Artroscopia, miembro fundador de la Sociedad Mexicana de Cirujanos de Hombro y Codo, miembro titular de la Sociedad Latinoamericana de Cirujanos de Hombro y Codo, miembro internacional de la American Academy of Orthopedic Surgeons, miembro titular de la Arthroscopy Association of North America y miembro asociado de la American Orthopedic Society for Sports Medicine.

Tengo importantes actividades editoriales y actualmente soy Editor Adjunto del Acta Ortopedica Mexicana y miembro del Consejo Editorial de importantes revistas internacionales como la revista Arthroscopy, American Journal of Sports Medicine, Orthopedic Journal of Sports Medicine y Sports Medicine and Arthroscopy Review. Asimismo, soy revisor del Journal of Shoulder and Elbow Surgery.

Servicios de Alta Especialidad

Artroscopia

La artroscopia es una técnica quirúrgica que permite examinar y tratar las lesiones de las articulaciones mediante la introducción de una cámara y unos instrumentos especiales a través de pequeñas incisiones en la piel. Su historia se remonta al siglo XIX, cuando el médico francés Henri Dorier realizó la primera artroscopia de rodilla en un cadáver. Desde entonces, la artroscopia ha evolucionado mucho gracias a los avances tecnológicos y científicos que han permitido mejorar la calidad de las imágenes, reducir el tamaño de los instrumentos y ampliar el número de articulaciones que se pueden explorar y tratar.

La artroscopia está recomendada para diversas patologías que afectan a las articulaciones, como la rotura de meniscos, ligamentos o cartílagos, la inflamación sinovial, la artrosis, la artritis o las infecciones. La artroscopia tiene muchas ventajas frente a la cirugía abierta tradicional, como una menor agresión a los tejidos, una menor pérdida de sangre, una menor probabilidad de complicaciones, una recuperación más rápida y un mejor resultado estético y funcional.

La artroplastia es un procedimiento quirúrgico que consiste en reemplazar una articulación dañada por una prótesis artificial. El objetivo de la artroplastia es aliviar el dolor, mejorar la movilidad y la función de la articulación, y restaurar la calidad de vida del paciente.

La historia de la artroplastia se remonta al siglo XIX, cuando se realizaron los primeros intentos de implantar materiales metálicos o de marfil en las articulaciones. Sin embargo, estos implantes no eran biocompatibles y causaban infecciones, rechazo y aflojamiento. Fue en el siglo XX cuando se desarrollaron las primeras prótesis articulares modernas, basadas en el uso de materiales como el acero inoxidable, el polietileno y el titanio. Estos materiales ofrecían mayor resistencia, durabilidad y adaptación a los tejidos óseos.

La evolución de la artroplastia ha sido constante y ha incorporado avances tecnológicos como la cirugía mínimamente invasiva, la navegación por computadora, la impresión 3D y los biomateriales. Estos avances han permitido diseñar prótesis más personalizadas, precisas y funcionales, que reducen el riesgo de complicaciones y mejoran los resultados clínicos.

Las patologías para las que está recomendada la artroplastia son aquellas que causan un deterioro severo de la articulación, que limita la actividad del paciente y que no responde al tratamiento conservador. Las principales patologías son la artrosis, la artritis reumatoide, las fracturas articulares, las deformidades congénitas y las infecciones.

Las ventajas de la artroplastia en cuanto a calidad de vida del paciente son evidentes. La artroplastia permite eliminar el dolor crónico, recuperar la movilidad y la independencia, volver a realizar actividades cotidianas y deportivas, y mejorar el estado de ánimo y la autoestima. Según diversos estudios, la satisfacción de los pacientes sometidos a artroplastia es alta y su calidad de vida mejora significativamente.

Las lesiones deportivas son aquellas que se producen durante la práctica de una actividad física o deportiva. Pueden afectar a diferentes partes del cuerpo, como los huesos, los músculos, los tendones, los ligamentos o las articulaciones. Algunas de las lesiones deportivas más comunes son los esguinces, las distensiones, las fracturas, las luxaciones o las tendinitis.

La función del traumatólogo deportivo es prevenir, diagnosticar y tratar las lesiones deportivas. El traumatólogo deportivo es un médico especializado en el aparato locomotor y en las patologías relacionadas con el deporte. Su objetivo es ayudar al deportista a recuperar su salud y su rendimiento óptimo, así como a evitar posibles complicaciones o secuelas.

Para ello, el traumatólogo deportivo realiza una valoración integral del deportista, teniendo en cuenta su historia clínica, su examen físico, sus pruebas complementarias y su nivel de actividad física. El traumatólogo deportivo también prescribe el tratamiento más adecuado para cada caso, que puede incluir desde medidas conservadoras, como el reposo, la aplicación de frío o calor, la fisioterapia o la rehabilitación, hasta intervenciones quirúrgicas, como la artroscopia o la prótesis.

El traumatólogo deportivo también tiene un papel importante en la prevención de las lesiones deportivas. Para ello, ofrece consejos sobre cómo realizar un calentamiento adecuado, cómo elegir el material y el calzado apropiados, cómo adaptar el entrenamiento a las condiciones físicas y ambientales, cómo evitar los sobreentrenamientos o cómo incorporarse al deporte tras una lesión.

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